sábado, 30 de noviembre de 2013

-Capítulo 20_Sensaciones contradictorias

-Capítulo 20_Sensaciones contradictorias

Dos agitadas respiraciones perturban el silencio del cuarto.
Hace bastante calor por el aire cargado, que resulta casi pesado.

Rape me quita la camiseta con brusquedad, deseoso de pasar sus finas manos por mi espalda, torso y cintura desnudos.
Mi espalda choca contra una descolorida pared en la total oscuridad.
-Jake... -jadea- vamos a pasarlo bien los dos solitos. Continuemos con lo de aquella mañana.
Me coge de la barbilla y  comienza besarme con ansia, devorándome los labios.
Acto seguido se quita la camiseta de un manotazo y me pasa los brazos tras el cuello, atrayéndome hacia su cálido pecho.
Estoy bastante nervioso por cómo pueda derivar la situación, pero por ahora reconozco que disfruto con el cortejo.
Rape es increíblemente atractivo, y su carácter perverso le da un toque peligroso de tipo duro que me hace estremecerme hasta lo más profundo de mi ser.
Vuelve a pegar sus labios a los míos y me los muerde con pasión.
Me mete la lengua en la boca y nos liamos perdiendo la cabeza momentáneamente.
-Rape... -jadeo ahora yo, dejándome llevar- me gustas, Rape. Me gustas mucho -le digo incoscientemente, aunque en el fondo es así.
-Lo sé, pivón -me contesta con una de sus encantadoras sonrisas perversas- y voy a hacer que te guste más aún.
Desliza sus manos por todo mi contorno, desde mis hombros donde las tenía hasta mi cintura, para llegar al extremo del cinturón de cuero.
Tira de él y lo suelta de la hebilla que lo mantenía sujeto.
Me desabrocha el vaquero y me lo baja hasta que cae al suelo.
Ahora él se quita el suyo con impaciencia y lo lanza lejos a algún lugar de la habitación.
Sé perfectamente lo que viene a continuación, y al parecer, no me equivoco.
Me presiona contra la pared, dispuesto a devorarme como un auténtico lobo.
Me mira fijamente y se relame, listo para atacar.
Un voraz bocado provoca que se me ponga más dura de lo que ya la tenía.
Gimo de placer mientras un brutal escalofrío me baja por todo el cuerpo, erizándome el vello de los brazos y poniéndome la piel de gallina.
Vuelve a morderme, una y otra vez, y noto que se me seca la garganta de tanto jadear.
Sin poder resistir el impulso, le pongo las manos en el culo, pegándomele más y presiono su entrepierna contra la mía, poniéndole más cachondo.
Entonces me pone de cara a la pared de un brusco movimiento.
-Castigado contra la pared, por chico malo. -me dice al oído- pero conmigo detrás... -añade con una sonrisa lasciva.

Me pongo bastante nervioso, sin saber cómo reaccionar. Me gusta cómo me seduce y tal, pero a la hora de tener sexo ya no me hace tanta gracia el tema.
-Jake... -jadea mientras se baja lentamente los calzoncillos -voy a hacerte el amor hasta que escupas sangre por la boca de tanto gemir.
-Rape... espera, vayamos con más calma... -le pido asustado intentando detenerle al sentir que me baja los calzoncillos.
-No Jake. No puedo aguantar más. Necesito hacértelo. Y ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Os invito a dar vuestra opinión. Sin embargo, os pido que os ahorréis críticas ofensivas y comentarios obscenos. Toda crítica constructiva será bien recibida. Gracias.